La raíz del black metal se encuentra en Noruega, que es donde sus grupos vuelcan sus letras profanas y oscuras al mundo. Sentados en su trono helado, dominan la escena de manera firme. Pero a veces surge algún intruso pegando un puñetazo en la mesa, argumentando que el Black de primera factura, también se puede manifestar en otros países. Es el caso del alemán René Wagner "Kanwulf", fundador y único miembro oficial de su banda Nargaroth. "Siete lágrimas fluyen hacia el río" tiene casi 15 minutos de duración y sigue el patrón de una canción depresiva suicida, típica del Black metal. Comienza con una hermosa parte de guitarra acústica. Tiene riffs repetitivos, una guitarra limpia melancólica y una atmósfera totalmente triste. La composición suena de manera casi hipnótica y en forma de trance. Kanwulf canta con una voz tan áspera, que parece tener la garganta en llamas.Y es que el tema es tan bueno que la melodía te va cautivando y te ahogará en un mundo de desesperación, dolor y escalofrío. En la portada del álbum, se intenta imitar la imagen mítica de Varg Vikernes de Burzum. Su influencia es palpable. Nargaroth intenta asaltar el trono nórdico con esta obra maestra.
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